Irse. Volver. noviembre 7, 2007
Posted by Marta in Letras con nombre propio.trackback
Hay veces que no sabemos explicar por qué algo nos impresiona, nos gusta o casi nos roza.
A menudo, las sensaciones que uno percibe son complejas y cuesta encontrar la manera de transmitírselas a los demás con palabras. Suelen quedar incompletas, aun cuando las desmenuzamos concienzudamente o las comprimimos en letras para atarlas al papel.
Hoy he leído “Contra el óxido” (por Ander Izagirre en su blog, A topa tolondro).
Y no sé qué más decir. Sólo que todo lo que yo añada, sobra.
Menos esto: no pasen sin leerlo.
Ander es de lo mejor que uno se puede topar en la red. Un blog imprescindible.
Estoy con J. y con Marta: lectura imprescindible.
Yo estoy con J., con Miguel y con Marta. Una lectura indisoluble.
¡Gracias, majos!
Marta, lo de no saber cómo expresar algo con palabras…eso ya casi ha desaparecido de tu horizonte de experiencias. No tengo mucho tiempo, pero cuando paso por aquí disfruto una barbaridad leyéndote. Y gracias por el dato, me ha encantado la entrada de Ander. Oxigenante.
En cuanto termine las horas extras, pague los recibos, refinancie los préstamos, robe para costearme unas cebollas y deje de tocar la painoguitarra en el metro me lo leo. Palabra.
Grande Ander, he leido muchas de sus historias. Mucho mundo. Besote.
-> Eso es, Leyre. Grandeenorme.
-> Muy bien, Pianista. Veo que has llegado al fondo del asunto y has captado toda la esencia. Campeón.
-> ¡¡Qué va a desaparecer, AnaCó!! El “no saber” me acompaña a diario; te contaré… Gustazo verte por acá, como siempre.
-> Plenamente disoluble, Ander -en el mejor de los sentidos-: cala de la primera a la última letra. Gracias a ti.
-> Y Miguel y Javi también se unen al club de los pelotas, que diría el Pianista. ¡¡Ahí estamos todos!! y tan contentos.