Señal junio 13, 2008
Posted by Marta in La vida misma.trackback
La última vez que te dijo “hasta luego”, en realidad, estaba pensando “hasta nunca” porque se había prometido olvidarte, no volver a verte y escapar de tu sombra.
Pero ayer, al llegar a casa, se topó con un furgón enorme aparcado delante del portal. Justo delante. Y con letras rojas, grandes, desafiantes, tu nombre dándole las buenas noches.
¿Una señal, quizá?
A la mañana siguiente, ya no seguía allí.
¿Otra, tal vez?
Lo importante, no es la señal (furgón con letras grandes) sino lo que indica o simboliza. La señal puede significar muchas cosas eso sí. Buenas noches.
Hasta mañana
Hasta nunca.
Hola?
Mmmmm…quien sabe.
Las señales están ahí porque nosotros las vemos ahí. Casualidades. A la mañana siguiente, quizá estacionon el furgón unos metros mas atrás, en otra manzana -tal vez-, o circulaba por Bilbao. Pero seguía siendo, sin estar ahí.
Mi amigo JSVico colateralmente tocaba un asunto similar: el que dice más, menos, distinto sobre lo que piensa. O eso creí entender. Si pensó y no dijo y luego tuvo que leerse los letreros de las furgonetas para reafirmar lo que no afirmaba, pues más valía que se aclarase pronto, pobre.
Ay, qué lío.