Encargo marzo 22, 2008
Posted by Marta in La vida misma.3 comments
– Está siendo muy duro ¿sabes? Y lo peor aún no ha llegado. Tengo miedo. Y además, ahora me he de marchar de nuevo… Mientras esté fuera, ¿me prometes que le apoyarás con toda tu alma?
– Te lo juro
– Sólo era una estúpida pregunta retórica. Sé que lo harás. Llevas haciéndolo toda la vida… Pero cuídamela mucho. Por favor
– No lo dudes
– Gracias -y le abraza fuerte-.
– Oye, ¿has descansado algo? Tú también tienes que cuidarte, lo sabes ¿verdad?
– Soy fuerte, tengo fe -las lágrimas empiezan a resbalarle por la cara-. Me encargaré de los demás, de que sufran lo menos posible. Sabré hacerlo bien aunque no pueda evitarles todo el dolor
– Sabrás, seguro que sí
– Y tú, niña… ¿qué hay de ti? ¿A ti, quién te cuida?
– Despreocúpate ¿sí? Yo estoy bien. Me sé cuidar sola – se sonroja y tiembla. Porque miente.